Historias de IA

Facebook, Netflix, Amazon, ¿por qué saben lo que quiero?

… Y entonces terminé de ver una serie en Netflix de la cual nadie me había hablado pero Netflix me había recomendado, así que tomé mi celular y decidí relajarme un par de minutos (los cuales fácilmente se volvieron una hora) en Facebook, Instagram y hasta Tik Tok, para después dormir tranquilamente sin darme cuenta de que había interactuado con toneladas de Inteligencia Artificial.

Seguramente más de uno se siente identificado con ese pequeño párrafo, tal vez tú que lo acabas de leer, «pero Alberto, yo no tengo Netflix, rara vez uso Facebook e Instagram y ni siquiera sé qué es Tik Tok», podrías decir, pensando que estás exento de la Inteligencia Artificial, pues déjame decirte que estás sumamente metido en todo esto.

Si eres de los que se asustó con esa frase, tranquilo, mientras sigues leyendo encontrarás más y más información de porqué no hay que asustarse, es más, podrás hasta llegar a querer a la Inteligencia Artificial en tu vida (puede ser muy cómodo).

El otro día (ese tiempo indefinido que está entre ayer y hace 5 años) estaba conversando muy a gusto con una amiga en un café, nada fuera del otro mundo y ella me comentó que había visto una serie y que le había encantado pero cuando me dijo el nombre ni idea tuve de su existencia, sin embargo, ella estaba emocionadísima platicando sobre esa serie, así que terminé viéndola y, para mi sorpresa, me agradó, después de eso mi inicio de Netflix me recomendó una película de la misma temática y similar en contenido, y pensé «muy bien jugado Netflix, muy bien jugado». ¡Netflix estaba aprendiendo de mí!

«A ver, a ver, calmado, ¿aprendiendo de mí?» Yep, así como lo lees. A mi, en lo personal me parece fantástico, ¿cuántas veces nos quejamos de que alguien no nos pone atención? ¿Cuántas veces contamos nuestros gustos una y otra vez a la misma persona y hasta parece que no le importa? Algo como: «Me gustan los tacos al pastor» le dices a tu pareja y cuando le pides unos tacos te los da de tripa (aunque hubiera de pastor)… Ojalá pusieran más atención ¿no crees?

Resulta que Netflix, así como muchas otras empresas, por ejemplo Amazon, Facebook, Spotify usan algo llamado “Sistemas de recomendación” los cuales se basan en ¿qué crees? Inteligencia Artificial. 

Ok, ok, ya mencioné mucho a la IA, ahora una pequeña explicación de cómo funciona para este caso.

Tú tienes tu cuenta de usuario, todo feliz de la vida, y desde el primer instante en el que haces algo, lo que sea, se guardan registros de eso que hiciste como la hora, si hiciste click, cuánto tiempo estuviste en una sección determinada, si realizaste una búsqueda como “lugares de comida cerca de mi casa” o de cualquier tipo, si estás viendo la página desde tu computadora o celular y demás cosas que hayan determinado los que hayan hecho el lugar en internet al que entraste (el sitio, como éste) y todos estos registros son otorgados a unos algoritmos que están dentro de la IA que permiten que la computadora aprenda de ti, estos algoritmos son de Aprendizaje de Máquina (AM), específicamente de Aprendizaje por Refuerzo (AR).

El Aprendizaje por Refuerzo es un área muy pequeña dentro de la IA, no vayas a pensar que es lo único que existe, es más, las empresas usan todo tipo de algoritmos, no sólo de Aprendizaje por refuerzo, pero te hablaré un poco de éste.

Imagina esta situación: Es lunes y llegas a un restaurante en el cual nunca habías comido, ves la carta y, a los pocos minutos llega el mesero «¿qué le puedo servir?» te pregunta con toda la elegancia del mundo y tu pides el platillo que más te apeteció, al poco tiempo el mesero te lo trae decorado de la forma más bonita que puedas imaginar, es más, hasta piensas en tomarle fotos y tal vez no comerlo para no arruinarlo, pero tienes hambre así que lo empiezas a comer y en el primer bocado descubres que está delicioso. Satisfecho, pagas la cuenta y dejas una generosa propina. Pasa una semana y un día, es martes, y decides regresar a ese lugar, tomas asiento y el mesero te pregunta «¿desea ordenar lo mismo de la vez pasada?», aunque asombrado porque el mesero haya recordado tu platillo anterior, siendo que solamente has ido una vez, le dices “no, gracias, quisiera ordenar ahora este otro”, al poco tiempo llega el mesero con otro platillo igual de apetecible y delicioso que el anterior, lo comes, pagas, dejas propina y te retiras satisfecho. A la siguiente semana, de nuevo en un lunes, regresas a ese restaurante y el mesero te dice, con la misma voz tranquila que las veces anteriores «buenas tardes, hoy es lunes, ¿desea ordenar lo mismo que el lunes hace dos semanas o desea cambiar su pedido?»…

El mesero del ejemplo anterior sin duda podría ser el mejor mesero de la existencia, además de saber qué has pedido ¡aprende de lo que vas haciendo! 

A diferencia de los algoritmos de otros tipos de AM, los que pertenecen al AR se van actualizando a medida que interactúas con ellos, aprenden de ti y toman decisiones con base en eso. 

¿Te imaginas que tu pareja sea así de atenta?

Es increíble cómo algo tan sencillo puede mejorar considerablemente nuestra experiencia, algo similar pasa cuando estamos buscando “viajes a la playa” y, de repente, como si te espiaran, aparecen anuncios de viajes, vuelos, hoteles, paquetes de turistas en Facebook, Instagram y cuanta más cosa se te ocurra… No es magia, no es espionaje, es ciencia, es Inteligencia Artificial.

 

Más adelante hablaré acerca de los otros tipos de Aprendizaje de Máquina y de Inteligencia Artificial en general. Te hablaré sobre avances, aplicaciones, filosofía, ética y cuánto más tema se me ocurra.

Hasta pronto y que tengas un maravilloso día, maravillosa tarde o maravillosa noche :D